El color de los ojos cambia de acuerdo al estado emocional que nos encontramos. Además, se ven afectados por el estado del tiempo (soleado, lluvioso, nublado) y las condiciones de luz de lugares cerrados o abiertos, como oficinas y parques.
Azul, gris, rojo, café son colores que cambian todo el tiempo. Café/marrón es el color que más cambia, puede pasar de café a negro o de café a café verdoso. Ha sido comprobado que no existen ojos 100% negros ya que lo que vemos es ausencia de luz.
Los ojos azules son más comunes en Europa, los café en Sudáfrica y cambian conforme la mezcla de razas.
El gris viene del azul que posee menos melanina, por eso el color grisáceo puede cambiar al verde o al azul, conforme la condición de luz.
Si una persona tiene en su núcleo familiar alguien con ojos claros, tendrá altas probabilidades de heredar este color de ojos.
Los que tienen albinismo, personas con piel muy blanca, tienen ojos rojizos, que evidencian falta de pigmentación. Esta condición queda en evidencia ya que los vasos sanguíneos rojos permean, dando origen al color violeta que es aún más raro.
Las personas que nacen con los ojos claros muchas veces con la creación de melanina en el cuerpo acaban oscureciendo el iris. Por otra parte, las personas que nacen con ojos oscuros pueden tenerlos más claros después de x tiempo, si la pigmentación disminuye.
Quien nace con heterocromía, tiene un ojo de diferente color que el otro. Puede ser que uno sea más café, por la presencia de pigmentación, y el otro más azul, por la falta de pigmentación. Esta condición puede ser hereditaria.
¿Es verdad que los ojos claros son más sensibles a la luz?
¡No! La pigmentación que le da color al iris no tiene ninguna relación con la sensibilidad de la luz. Quien responde por eso son las células fotosensibles que se encuentran en la retina en el interior del ojo.
La fotofobia, molestia ocular en presencia de luz brillante, ocurre en casos específicos. Uno de ellos es la distrofia de los conos, una enfermedad hereditaria,
Que presenta como signos más importantes la pérdida de la agudeza visual y una visión defectuosa de colores desde los primeros estadios.
Otro caso es el de personas que tienen astigmatismo pero no lo corrigen, es decir, no usan anteojos. La luz molesta en el esfuerzo de intentar mirar las imágenes que ven desenfocadas.
0 comentarios:
Publicar un comentario