Con la llegada del fuerte sol primaveral te recomendamos que te protejas con lentes de contacto con filtro UV, así mismo usa gafas de sol pues en ningún caso el filtro UV de las lentes de contacto puede sustituir al filtro que tienen estos anteojos, ya que no cubren totalmente el ojo ni el área circundante.
Ya llegó la primavera y con ella el calorcito y aunque las calles se llenan de alegría, colores y flores no todo es dicha, también es un aviso para que te protejas del sol y de sus temibles rayos Ultra Violeta (UV), los cuales son cada vez más poderosos y dañinos por el calentamiento global.
Todo el tiempo escuchamos hablar a expertos incluso a nuestras mamás y abuelas de los daños que el sol le puede causar a nuestra piel, pecas, manchas, arrugas, cáncer, pero ¿qué le puede hacer a nuestros ojos?.
Es importante que no ignores esta situación porque como decíamos anteriormente, debido al calentamiento global, el planeta está perdiendo la capa que nos protege de los rayos del sol (la capa de ozono) lo que ocasiona que la radiación UV pueda afectarnos más directamente y hay que tomar medidas severas al respecto.
Los temibles rayos UV
Casi todos los órganos de nuestro cuerpo tienen la capacidad para reparar y regenerar sus células dañadas, pero el cristalino del ojo no y por esto, afecciones como las cataratas invaden rápidamente el área hasta causar la ceguera, puesto que son el resultado del daño acumulado por las proteínas del cristalino, ocasionado por la radiación UV.
Así mismo, la radiación UV contribuye al desarrollo de la degeneración macular, lo que significa el deterioro del centro de la retina. Este quebranto se produce normalmente por la edad pero la exposición en exceso al sol puede incitar a que se presente antes de tiempo.
De igual manera los rayos UV también están presentes en las causas del cáncer de piel ocasionando que los melanomas aparezcan en los párpados.
¿Cómo protegernos de los rayos UV?
• La mejor manera de proteger los ojos de los efectos nocivos de la radiación ultravioleta es usar un filtro UV que evite que los rayos dañinos entren en el ojo. Las gafas y las lentes de contacto pueden incorporar una protección UV.
• Todas las lentes de contacto ACUVUE® tienen filtros UV* incorporados en el material de las lentes, que ayudan a protegerte a lo largo de todo el año, no solo en los días soleados de verano.
• Las gafas de sol no absorben todos los rayos UV, ya que la luz del sol llega a los ojos por los laterales de las gafas. El uso de lentes de contacto con filtro UV te proporcionará una protección adicional.
• No todas las gafas de sol proporcionan el mismo nivel de protección. Unas buenas gafas de sol con una protección eficaz deberían poder absorber tanto los rayos UVA como los rayos UVB. Si bien todas las gafas de sol bloquean la radiación UVB, unas buenas gafas también debería poder absorber entre un 99 y un 100% de los rayos UVA.
• Elije gafas grandes que se adapten bien a tus ojos. Para evitar que la luz del sol llegue a los ojos por los laterales de las gafas, utiliza gafas de tipo envolvente.
• Las costosas gafas de sol de diseñadores o los cristales polarizados no necesariamente garantizan una protección eficaz contra los nocivos rayos del sol.
• Las gafas de sol normales – que no disponen de una certificación de protección UVA/UVB – pueden causar aún más daño a tus ojos, porque los cristales oscuros hacen que las pupilas del ojo se dilaten, permitiendo que una mayor cantidad de rayos UVA penetren y dañen la retina y el cristalino del ojo.
• Los niños también necesitan protección para los ojos. Al igual que ocurre con la piel, la mayor parte del daño causado por el sol en los ojos se produce en los primeros años de desarrollo de la persona. Por esta razón, es vital proteger a los niños de los efectos nocivos del sol.
• La luz del sol alcanza su mayor intensidad entre las 10 de la mañana y las 2 de la tarde, lo que significa que es en este periodo de tiempo más peligrosa es para la piel la radiación ultravioleta. No obstante, estudios recientes muestran que el riesgo para los ojos es mayor a media mañana y al final de la tarde, por lo que debes asegurarte de protegerlos todo el día.
• La luz reflejada puede causar quemaduras en los ojos. A gran altitud, en montañas nevadas, playas de arena y superficies de agua reflectantes como lagos, ríos o el mar, la exposición del sol puede ser mucho más intensa.
• Una buena nutrición también puede contribuir a proteger tus ojos. La luteína, presente en alimentos como la col rizada, las espinacas, el brécol y muchas frutas y verduras amarillas o naranjas, actúa como un antioxidante que protege las células. Ayuda a prevenir que la luz azul nociva alcance – y, por lo tanto, dañe – al tejido posterior sensible de la retina. Así pues, la luteína ayuda a reforzar la protección que ofrecen las lentes de contacto y gafas con filtro UV.
Fuente: Acuvue
0 comentarios:
Publicar un comentario