Tiene lugar cuando se produce una sequedad excesiva de la superficie ocular por distintos motivos.
La responsable de que la superficie ocular se mantenga húmeda es la película lacrimal. Ésta se compone de tres capas: una mucosa, muy lubricante; otra acuosa, formada básicamente por agua y electrolitos encargada de purificar y refrigerar y una cobertura lipídica que controla la evaporación de la capa acuosa.
Cuando existe una alteración en cualquiera de esas cuatro capas que modifica la película lagrimal tiene lugar el ojo seco provocando una producción deficiente de humedad o una evaporación excesiva de la lágrima.
Además de cómo consecuencia de ciertas enfermedades, la ingesta de algunos medicamentos, la edad, también existen ciertos hábitos que favorecen su aparición y que pueden modificarse con el fin de prevenir el ojo seco.
Toma estos consejos para evitar el problema del síndrome de ojo seco:
- Aumenta la humidificación ambiental.
- Sigue una alimentación que aporte la adecuada cantidad de vitaminas especialmente de tipo A, presentes en algunas verduras como la zanahoria, tomate, cebolla y de ácidos grasos esenciales, como los omega 3 y los omega 6.
- No abuses de los lentes de contacto y utiliza las que ofrezcan mayor permeabilidad al oxígeno.
- Haz descansos cada cierto tiempo en el trabajo si tu labor supone el estar frente a pantallas, de este modo mejorarás el parpadeo y la humedad de la superficie ocular.
- Debes mantener una distancia prudencial, es fundamental para evitar sobre esfuerzos que conlleven a una menor frecuencia de parpadeo.
- La iluminación también es muy importante. Ésta debe ser suficiente para no tener que forzar la vista.
- Duerme las horas necesarias porque, de este modo, se facilita la regeneración de la superficie ocular durante el sueño.
- Debes controlar factores asociados como las alergias que contribuyen a aumentar los síntomas de ojo seco.
- Aumenta la humidificación ambiental.
- Sigue una alimentación que aporte la adecuada cantidad de vitaminas especialmente de tipo A, presentes en algunas verduras como la zanahoria, tomate, cebolla y de ácidos grasos esenciales, como los omega 3 y los omega 6.
- No abuses de los lentes de contacto y utiliza las que ofrezcan mayor permeabilidad al oxígeno.
- Haz descansos cada cierto tiempo en el trabajo si tu labor supone el estar frente a pantallas, de este modo mejorarás el parpadeo y la humedad de la superficie ocular.
- Debes mantener una distancia prudencial, es fundamental para evitar sobre esfuerzos que conlleven a una menor frecuencia de parpadeo.
- La iluminación también es muy importante. Ésta debe ser suficiente para no tener que forzar la vista.
- Duerme las horas necesarias porque, de este modo, se facilita la regeneración de la superficie ocular durante el sueño.
- Debes controlar factores asociados como las alergias que contribuyen a aumentar los síntomas de ojo seco.
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